A veces no puedo, a veces no quiero, a veces sólo tengo ganas de parar, de respirar profundo y de encontrar algo hermoso en qué posar mis ojos. Y lo hago. También eso es haceme cargo, de mis necesidades más profundas y vitales: las internas.
Y está bien, lo sé. Y puedo soltar mi autoexigencia y mis expectativas... sólo ser, sólo estar. También eso pasa. Y está bien.
Te deseo un instante como éste: de fluir, de soltar. Un instante de paz.
¡Hola Lilyán! Sí, todos necesitamos y con bastante frecuencia "fluir y soltar", también podría decirse, dejarse estar, conformarse porción del río de la vida y hacerse viaje con sus meandros y pozas, su susurro interminable. Las espectativas, no nos pueden privar del tesoro perceptual del instante en su doble connotación interna y externa ¡Solo eso es vivir! Muy bella esta entrada, por su forma y contenido. Como siempre disfruto al visitar tus blogs. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarHe visto tu comentario en uno de mis blogs!
Perdona por responderte tan tarde, pero llevo sin utilizar ese blog durante algún tiempo!
Por mí ningún problema en utilizar la imagen del cuadro Las tres gracias del siglo XXI.
un saludo!