De nuevo esa imagen tan recurrente y, sin embargo, tan hermosa. Esta noche, como coronando el cénit de mi casa, estaba la luna, casi media y un brillante luminoso junto a ella. Como el lunar junto a la boca de Cielito Lindo. Y, ya sabemos como es eso de ver lo que queremos ver en todo. Hasta hace poco tiempo, el satélite y el astro me evocaban un par de amantes. Hoy, me vi a mi misma: sonrisa de luna, lunar de luz. Me gustó la evocación. La sonrisa y la luz en medio de esa solitaria inmensidad. Hay, por supuesto, millones de otras estrellas, pero esta noche no se ven.
Me gusta mi luna sonrisa, me gusta la noche y esta luminosa sensación de ser un lunar estelar.
El amor y la compasión no son un lujo, sino una necesidad. Sin ellos, la humanidad no puede sobrevivir.
volvi del "Family Day" con la luna llena de frente durante todo el camino atras el crepusculo se despedia ..... que hermosa sensacion cada vez q la veo .... SUSPIRO y siento que me invade todo !!!
ResponderEliminarte sigo desde "los 40 y sus alrededores"....extraño esa pagina, ahora "Aqui viviendo" me deja con la sensacion de querer mas...."Continua escribiendo asi" como cuando eramos chiquitas y en el cuaderno la seño nos escribia...."Continua escribiendo asi" yo sigo transcurriendo mis cuarenta y sorprendiendome dia a dia con este ciberespacio ...
ResponderEliminarAnónima,
ResponderEliminarGracias por seguirme los pasos... mis cuarenta siguen transcurriendo también, ¡si apenas comenzaron! Fue sólo la sorpresa, el encuentro de corrientes entre la inercia de los treintas y esta década lo que celebré en "Los 40..." Sigo descubriéndome en esta nueva etapa, pero tenía que cerrar aquel ciclo.
No obstante, coincido contigo... también textraño aquella página. Y es cierto que a ésta le falta aún encontrar un rumbo definido... Ten paciencia, ¡en esas ando!
Un abrazo compañera de eras!
Anónimo:
Es un peligro tanta belleza en el cielo, ¿no es cierto? Un verdadero reto manejar sin ir mirando la luna en lugar del camino... ¡pregúntamelo a mi! Pero no cambiaría la luna por ninguna otra belleza natural... ¡qué placer es sentirla en la mirada!
Saludos!
Lilyán