miércoles, 30 de diciembre de 2009
La vida es una ola
Esta mañana ¡surfeamos! Sí, así como lo lees, jugamos con las olas en el mar, hasta el cansancio. Saltamos con ellas, las toreamos, nos zambullimos, y hasta las montamos sobre una tabla de fibra póxica color azul... "muuuy cool", dice mi hija.
Esta fue su tercera clase. Desde la primera logró ponerse de pie sobre la tabla de surfing, y avanzar hacia la orilla. Hoy se veía mucho más segura parada ahí arriba, deslizándose sobre la superficie del agua como si nada. Es una delicia.
Y, claro, ¡no pude quedarme con las ganas! Hoy fue mi primera clase de surfing. No logré ponerme de pie más de dos segundos, pero ya domino perfectamente todas las posibles formas de caerme de una tabla (!). Hay habilidades originales... ¿verdad? Lo que sí fue delicioso fue aprovechar la fuerza y velocidad de la ola para salir hasta la orilla abrazada a la tabla, o hincada sobre ella disfrutando del viento en mi cabello.... ¡Seguiré intentándolo! Pararme sobre una tabla y avanzar con las olas del mar nunca fue mi sueño. Pero hoy, que lo intenté, me volví fan del surfing... y seguiré persiguiendo las olas, ahora desde su cresta. ¡Qué maravilla! La vida nos ofrece tantísimas posibilidades...
Y justo eso pensaba... ya saben, en vez de relajarme, dejo que mi mente siga dando vueltas y encontrando analogías por todos lados. Mientras me revolcaba una ola y calculaba hacia dónde moverme para que no me fuera a caer la tabla encima, se me ocurrió que las olas eran como las crisis en la vida. Cuando la cosa se pone dura, tenemos dos opciones: dejarnos revolcar por la ola y tratar de salir lo menos ileso posible, o aprender a ponernos en pie sobre la tabla y tratar de salir lo menos ileso posible. Me gusta la idea de aprovechar la fuerza, la furia, el estruendoso impulso de la ola y salir con ella a la orilla con mucha más facilidad de lo que lo hubiéramos hecho a nado libre... Es decir, las olas pueden ser amenazantes, pero tienen el potencial de sacarnos de la tormenta salada si sabemos aprovecharlas... tal como las crisis en la vida.
Eso prefiero, eso quiero, aprender a surfear en la vida, aprender a crecer -no sólo a pesar de sus crisis, sino gracias a ellas también.
¡Qué viva el surfing, el viento que te impulsa, las olas con su belleza amenazante, y la posibilidad de aprovecharlas para salir del mar embravecido! E incluso, ¡gozarlo intensamente!
Si nos encontramos en estos días por alguna playa, no dudes en llamarme "surfeadora". Y si nos encontramos lejísimos del mar, tampoco tengas dudas: aún lejos del agua seguiré surfeando, cada día.....
martes, 29 de diciembre de 2009
Hope. Just for a change!
Ilustración de Trish Weill
Lista para recibir un año diferente: con esperanza (for a change!).
Algo bueno de la soledad, es que la esperanza tiene mayor fundamento. Lo que espero no depende de la voluntad ajena de un "otro", sino de mi misma.
Espero un año mejor, más libre de ataduras y lastres del pasado, en el que yo me ame más de lo que me he amado últimamente, más cercano a mis hijos, más activo física y espiritualmente, espero poner mi energía en mis proyectos -en lugar de en esperar nada de nadie-, espero seguir en paz conmigo misma, disfrutando de mi propia compañía...
Para ti, ¡también deseo un año lleno de ti mismo/a!
sábado, 26 de diciembre de 2009
Espirales
y de humo
por las que ruedo en picada
o al cénit
cuando camino dispersa
o con rumbo
hay espirales adentro
y afuera
como caminos de esfera
o de nudos
cantos de grave lamento
o agudos que cortan
y esta visión de montaña
o caverna
es espiral infinito
el destino
la libertad de correrlo
o mirarlo pasarte
es el sentido de estar
y de ser en centrífugos
duelos en serie.
miércoles, 23 de diciembre de 2009
Y sin embargo... se mueve: otra perspectiva de las burbujas
lunes, 21 de diciembre de 2009
Destino y libertad
Pues resulta que eso de la libertad es casi inexistente cuando se trata de construir el destino. Contrario a lo que yo pensaba y de lo que estaba convencida. Más allá de las variables que no dependen de nosotros, como en qué época nacer, en qué país, en qué familia, nacer hombre o mujer, nacer sano o con alguna enfermedad congénita... más allá de eso cuyo carácter fortuito puede prestarse a todo un debate, y dando por hecho que no tenemos la libertad para elegir ese contexto, también viene al caso cuestionarse la libertad que tenemos para movernos, decidir, reaccionar y actuar con respecto a las circunstancias que nos presenta la vida.
Los grandes filósofos coinciden: no podemos elegir las cartas del juego, pero sí podemos elegir cómo jugarlas. Pero pocas veces se entra en el debate de qué tan real es esta segunda libertad. El fin de semana, participé en un taller impartido por Spa del Alma, "Energía 2010", en el que el centro del debate fue justamente este. Ahí, comprendí un término que ya había escuchado pero en el que no había profundizado nunca: los introyectos. Estas creencias que asumimos como nuestras, aunque en realidad provienen de alguien más que las puso en nuestra mente. Los principales sembradores de introyectos son los padres y la mercadotécnia. Suelen reflejar necesidades de otros, no propias, pero que creemos que en realidad son nuestras.
Un ejemplo sencillo es el que dio nuestra instructora en el taller: "Las niñas bonitas no se ensucian". ¿Qué niña -bonita o no, eso no importa-, no escuchó esto en boca de su madre para evitar que jugara con lodo y se ensuciara? Probablemente la madre lo dijo para evitar que la ropa de la niña se manchara y ella tuviera más trabajo del que ya tenía encima. O tal vez lo dijo porque ella también lo escuchó de niña. El asunto es que hoy, una mujer adulta puede tomar decisiones pensando que lo hace libremente, y que en realidad provienen de una creencia insertada en su cabeza y no de sus propias convicciones. Las decisiones pueden ser tan simpes e inocuas como no sentarse a jugar con lodo con un hijo para no "ensuciarse", hasta más trascendentes como podría ser no atreverse a ser más lúdica en su sexualidad para no "ensuciarse".
Es un tema por demás interesante, que nos hace caer en cuenta de que a menudo vamos por la vida reaccionando a los estímulos de formas que en realidad no nos pertenecen, sino que provienen de alguien más que así nos los inculcó.
Pero la esperanza no está perdida. Todo lo contrario. En la medida en que hacemos conscientes nuestros introyectos, podemos desechar aquello con lo que en realidad no estamos de acuerdo, y comenzar a construir nuestras propias convicciones y creencias, en verdadera libertad.
En este momento de mi vida en el que sigo luchando por "soltar" lo que no fue, sé que debo revisar mis introyectos con respecto al divorcio, a crecer como hija de padres divorciados, a lo que es una familia, a lo que es el matrimonio... Tal vez no estoy actuando con la libertad que creo, tal vez si lo hiciera, sería menos doloroso... Tal vez.
No es fácil despedirse de la propia historia... toma demasiado tiempo... ¿se termina de verdad por decir adiós genuinamente?
lunes, 14 de diciembre de 2009
Burbujas
Burbuja. ¿Qué te evoca esta palabra? Burbuja... suavidad, perfección, belleza, libertad, esfera, vuelo, transparencia, inasible, sueño, impermanencia, espejismo, instante, inexistencia... Así siento hoy que son los sueños... como burbujas. A veces, increíblemente, es posible tocarlos, pero entonces se revientan y desaparecen para siempre. Queda el recuerdo, eso sí. Más perfecto incluso que la burbuja que tocamos y dejó de ser.
Y sin embargo, me siguen fascinando y sigo estirando los brazos para tocarlas, aunque sea por un momento de magia fugaz. Ultimamente también me gusta sólo mirarlas, ahí, suspendidas en el aire, cayendo poco a poco, hasta reventar frente a mis ojos, sin sorpresa... pero con el mismo dolor.
No quiero nunca renunciar a su belleza, pero estoy aprendiendo a renunciar al anhelo de quedármelas entre las manos...
lunes, 7 de diciembre de 2009
Amor compasivo
domingo, 6 de diciembre de 2009
Anhelo tu felicidad, anhelo la mía.
jueves, 3 de diciembre de 2009
Paradojas vitales
lunes, 23 de noviembre de 2009
Seguimos siendo niños
viernes, 20 de noviembre de 2009
Para un hombre sonriente
Conversamos poco, nos vimos en contadas ocasiones, pero su sonrisa lo decía todo. Su sonrisa y ese ritmo pausado pero estable que tienen quienes cuidan de los demás sin descanso. Se fue sin dolor y en compañía; se fue de pronto para no hacer sufrir a quienes lo querían; se fue y dejó huellas amorosas hasta en mi, que apenas lo conocí y aprendí a apreciarlo.
La última vez que lo vi, hace 9 meses, le regalé un sombrero de plumas rosas para su disfraz de la Catrina. Se lo puso de inmediato y sonrío, como sonreía siempre, profundo, genuino, inocente, travieso. Yo lo miré y tuve ganas de conocerlo más para que jugáramos juntos, tuve ganas de tener más tiempo para conversar mirándole los ojos sinceros, tuve ganas de quererlo mucho aunque no tenía motivos. Y entendí lo mucho que todos lo querían. Me despedí de él sin saber a ciencia cierta si volveríamos a encontrarnos, pero deseando que así fuera.
Hoy sé que ese reencuentro no será posible en esta vida. Pero mi paso fugaz por sus dominios me lo dejó acomodado en el corazón y aquí lo guardo, para alimentar mi sonrisa en el camino.
Descansa en paz, Joel. Y que los tuyos encuentren la paz en tu recuerdo alegre.
miércoles, 18 de noviembre de 2009
Lágrimas de asombro al cuadrado
Fue tan inesperado, que me ha costado horas acomodarlo en la cabeza para compartirlo aquí, contigo. Hace unos días, durante la junta escolar mensual en la escuela de mi hija mayor - en 4o. de primaria-, nos presentaron el material didáctico que utilizan para enseñarles a los niños a comprender de forma muy concreta lo que significa un binomio al cuadrado perfecto. En el sistema Montessori, las matemáticas son algo fundamental, que le da estructura al resto. De manera que el material que usan suele ser verdaderamente asombroso.
En algún momento de la vida "aprendí" que la fórmula de esta singular operación llamada binomio al cuadrado perfecto, era a2+2(ab)+b2. Lo aprendí de memoria, no sin antes preguntar por qué era esa la fórmula, cómo habían llegado a ella, y qué significaba. Por supuesto no obtuve respuestas. Pero no importó. Como me la aprendí de memoria, obtuve palomita en la respuesta y pude dar carpetazo para siempre al algebra en mi vida.
Y ahora llego, a mis 40 bien cumplidos, incauta y muy sonriente a enfrentarme de nuevo a este binomio. En esta ocasión, en el salón de mi hija y frente a todas las mamás de sus compañeritos. Y me lo ponen sobre las manos, con todo su peso y su color... con todo su significado, su forma, su sentido. Sí, frente a mi, a partir de una cuentita de color amarillo, vi cómo se fue conformando primero un cuadrado de 6 cuentitas por lado, luego un cubo de seis cuadrados, y frente a mis ojos cada vez más grandes de azoro, un hermoso y perfecto binomio al cuadrado perfecto, de madera tricolor, hecho de piezas macizas y pesadas... una belleza indescriptible. No pude contener las lágrimas (desde el cubo en adelante), y no sé explicar a ciencia cierta el por qué de mi llanto: un poco de asombro, un poco de angustia, un poco de añoranza por todas las cosas que no he comprendido a lo largo de la vida, otro poco de dolor por aquello de lo no aprendido para lo que ya no tendré oportunidad de reaprender, y un poco de alegría ante la maravilla de comprender, de ver materializarse frente a mi lo inasible, y entender... entender...
Nunca pensé que algún día lloraría por la belleza de las matemáticas. Créeme, nunca lo hubiera imaginado, y así fue. ¿Cuántas sorpresas más me tendrá reservada la vida?
martes, 10 de noviembre de 2009
Queremos más de Eve y de la Dama Oscura
La novela se desarrolla principalmente en México. La protagonista, sin embargo, crece rodeada de un ambiente japonés tan bien logrado, que me costaba trabajo recordar que, de hecho, estaban en México.
La sensación de estar leyendo una historieta manga era muy clara. No soy una experta en el género, ni mucho menos, pero mientras lo leía, podía imaginar perfecto a los personajes tipo los dibujos animados nipones que veía en la televisión cuando era niña. La estructura también me remitía a una historieta.
Sho-shan y la Dama oscura es una historia intensa que atrapa desde la primera página. Tiene elementos de misterio y de aventura, y gira en torno a valores tales como la lealtad, el amor de la familia, el perdón y la aceptación de las diferencias. Es una novela dolorosa porque nos refleja el grado de violencia existente en nuestra sociedad, en especial hacia las personas diferentes, en forma de xenofobia y de discriminación.
Es una novela divertida, que encuentra el humor en los momentos más inesperados. Es interesante porque nos lleva de la mano a un mundo con el que estamos poco familiarizados: el género del Animé japonés. Es crudamente realista al retratar la impunidad, la injusticia y el tráfico de influencias en México. Es conmovedora porque también retrata el enorme valor de la unión, la confianza y el amor incondicional que puede existir en una familia.
Sho-shan fue escrita pensando en lectores jóvenes, pero también en los padres de estos lectores jóvenes. Yo no la solté hasta terminarla. Y no llevaba ni el primer capítulo cuando mi hija ya me estaba correteando para que la terminara. Ahora, es ella quien no me dirige la palabra (¡ni se la dirige, por fortuna, a la televisión!), pues está muy ocupada con la Dama Oscura.
Sho-shan es entrañable. La acabas en un trís, pero no quieres que termine. Quieres saber qué va a pasar, pero también que seguirá pasando. Con esta novela, Eve queda en deuda con nosotros, ¡porque queremos más!
Visita Sho-shan to Fujin Kuroi para ver más reseñas sobre esta obra. Y ayúdame con "votos" para que Eve no cierre su blog All about la Eve , que es una bitácora más personal, justo ahora, que su novela está despegando como si tuviera propulsor con fuerza para llegar a la luna.
lunes, 9 de noviembre de 2009
De las libertades
¡Cuántas imágenes tan emotivas se evocan de aquel día tan significativo en la historia contemporánea! Manifestantes golpeando el muro con picos ante los soldados que, sin órdenes de disparar los miraban impávidos; reencuentros de familiares después de 28 años; berlineses de un lado ayudando a trepar el muro a berlineses del otro lado; caras incrédulas, temerosas de creer que sea verdad, temerosas de creer que no lo sea; incertidumbre, miedo, emoción, esperanza.
Y es que no todo era tan claro. Por supuesto que la caída del muro implicaba libertad, y eso ya era para celebrarse, sin lugar a dudas. No obstante, también representó para muchos la caída de un sueño: de la utopía que ofrecía el socialismo, la lucha contra las desigualdades y la lucha de clases. Era una muestra clara de que el modelo se había desmoronado.
"Y sin embargo, viendo caer la muralla, uno como ser humano no podía más que alegrarse. El sentimiento predominante en esos días, fuera uno de izquierda o de derecha, era de alegría. Emocionaba ver a los jóvenes derrumbar el muro y abrazarse los de un lado con los del otro, con las lágrimas corriéndoles por las mejillas. El gesto aquel era tan razonable, tan profundamente trascendente la aspiración de romper las barreras que uno se daba cuenta de que el fenómeno superaba las ideologías y apuntaba a la realidad de que la libertad y las posibilidades humanas se resisten a los muros tanto de ideas, como de concreto o de púas."(1)
Poco tiempo después de que se abrieran las fronteras, pasé un año nuevo cruzando de una Alemania a la otra "libremente". Lo entrecomillo porque, si bien la libertad de tránsito ya estaba instaurada, mi libertad personal era precaria. Estaba donde no quería estar y con quien no quería estar, haciéndonos pasar a ambos un muy mal rato (¡perdón! 20 años después...) He cometido ese error muchas veces a lo largo de la vida. Como lo demostró la caída del muro, no es suficiente con derribar el concreto, como no lo es tampoco proclamarse a uno mismo libre para serlo de verdad. Hace falta construir la libertad: la externa, pero especialmente la interna.
El día de hoy, pues, celebro el vigésimo aniversario de la caída del muro -y los cuarenta años que llevo construyendo mi incipiente libertad, hoy menos precaria que hace veinte años, sin duda. Celebro la libertad y la posibilidad siempre latente de ejercerla en lo personal y doméstico, tanto como en lo público y social. Y lo celebro porque, en ello, es posible encontrar aunque sea un poquito de plenitud.
(1) Belli, Giocconda. "Lo que cayó con el muro". Consultado en su página web el 9 de noviembre de 2009.
miércoles, 4 de noviembre de 2009
De jolgorios y velorios: mañana 8 pm
Los independientes: Salamandra
lunes, 2 de noviembre de 2009
Camino a casa
En el espejo retrovisor divisé de pronto la ciudad con sus altos y modernos edificios y su paisaje tan urbano. De telón de fondo la Malinche envuelta en nubes. En el camino, alrededor, el campo. Campos sembrados y rebozantes. Vacas y campos amarillos. Campos de amaranto, del color de la alegría. Pueblos pequeños salpicados de casas azules, como de Brahmines. Y valles inventados, con sólo una salida al cielo. Nubes tan bajas que me acarician el pelo. Y una fila de eslabones para llamarte de nuevo.
De frente, mis volcanes. Los que siempre han sido míos, antes de nadie. El Popo y el Izta, majestuosos e invitantes. Dejándose ver, haciendo a un lado fumarolas y camas de nubes blancas para decirme Aquí estamos, aquí estás tú, aquí está lo que eres. Aquí está a donde vas.
Nostalgia y pan de muerto
miércoles, 28 de octubre de 2009
Pizarrón del Día de Muertos
martes, 27 de octubre de 2009
Miradas furtivas
Poemas de otros a lo Benedetti
De Mariana para Aurelio
Te nombro y se encienden mis labios
Me miras y siento una espada surcando mi cuerpo
Sonríe mi boca a tu boca
Después huyen raudos mis pasos
Y el corazón queda en pausa infinita
Hasta el próximo encuentro
En que vuelvo a ignorarte.
sábado, 24 de octubre de 2009
Dónde la cera escarlata
martes, 20 de octubre de 2009
Qué manera
lunes, 19 de octubre de 2009
Se cayó la luna, se calló la luna
jueves, 15 de octubre de 2009
Feliz cumpleaños
Vivir el aire
Salve
Belleza
Paradojas
miércoles, 14 de octubre de 2009
Deudora
martes, 13 de octubre de 2009
Desnúdate
Te mando un canto de grillos
lunes, 12 de octubre de 2009
Se trata de volar
Si sólo se tratara de volar
ya habría volado
pero se trata de sostener el vuelo
de abrir las alas y asir el viento
de inventar con cada aleteo
senderos en el aire
veredas transparente que perduren
se trata de abrir las alas
y entregarse al cielo
creer en su silencio
en su azul de nitrógeno
que es el de soñar despierto
se trata de abrir las alas
y habitar cada horizonte
como si no hubiera más que eso
lejanía certera, inamovible
se trata de volar
como si no hubiera habido nunca
otra posibilidad
sino batir las alas
o caer en el barril sin fondo
para siempre.
martes, 6 de octubre de 2009
El gerundio de vivir
miércoles, 30 de septiembre de 2009
La belleza ineludible
- Son lo más cercano a la eternidad que conocemos -dijo Prudencia -. Ni tus lágrimas van a durar tanto.
- Ni mis lágrimas -aceptó Isabel. Había dejado de llorar hacía una hora -.Espero que ningún desamor sea tan largo. Pero mi breve paso por el cielo, ese sí duró tantísimo. Tengo a estos volcanes de testigos. Ninguna eternidad como la mía.
Un haiku, para mi paisaje favorito del día de hoy. Amo al Popocatépetl. Hasta el nombre, ¡es divino!, ¿no?
Tu crepúsculo
gigante coronado
me embriaga el alma
martes, 29 de septiembre de 2009
Sonrisa y luz
De nuevo esa imagen tan recurrente y, sin embargo, tan hermosa. Esta noche, como coronando el cénit de mi casa, estaba la luna, casi media y un brillante luminoso junto a ella. Como el lunar junto a la boca de Cielito Lindo. Y, ya sabemos como es eso de ver lo que queremos ver en todo. Hasta hace poco tiempo, el satélite y el astro me evocaban un par de amantes. Hoy, me vi a mi misma: sonrisa de luna, lunar de luz. Me gustó la evocación. La sonrisa y la luz en medio de esa solitaria inmensidad. Hay, por supuesto, millones de otras estrellas, pero esta noche no se ven.
sábado, 26 de septiembre de 2009
Mi paz no es sólo ausencia de la guerra
¿En qué consiste la paz? No son fáciles las definiciones. Todo termina siendo subjetivo, así que podríamos decir que las definiciones, como todo lo demás, son cambiantes, impermanentes, inexactas. Especialmente las definiciones de aquello que está vivo. Y también de lo que no lo está. Finalmente las definiciones se hacen desde el punto de vista de alguien vivo, que percibe.
La paz, por ejemplo. Podría definirse por aquello que no es, como la ausencia de guerra o como un estado de ánimo apacible. Pero hoy, que me encuentro con el ánimo sosegado y no estoy en guerra, tengo ganas de encontrar definiciones personales para mi paz:
silencio cálido
ramas que se mecen
murmullo del agua
azul, verde, blanco
mantra
sonreír para adentro
campanitas de viento
luz de luna como aura
noche sin luna, estrellada
té verde con pétalos de rosa
la voz como de agua quieta de mi papá
la mirada luminosa del retrato de Alis
Renato dormido
el abrazo fortísimo de Sabi
un baño de tina a la vainilla
una mano amiga tomando la mía con firmeza
sentarme a escribir sin prisa
respirar profundo
sentir el correr de la sangre en mi cuerpo
las castañuelas de un caballo trotando parejito
una lluvia suave, casi niebla
las olas del mar, tan infinitas
el viento descubriendo mi cara
el momento justo en que concilio el sueño
la voz nostálgica del violonchelo
un camino de piedras mojadas por la lluvia
la quietud del horizonte
el regalo de la vida
Para el día de hoy tengo un deseo ferviente para ti: ¡Que la paz sea contigo! (aunque no sea domingo).
miércoles, 23 de septiembre de 2009
Día gris, corazón soleado
¡Ay, qué bien me siento hoy! El día es gris y mi corazón está soleado; llueve y el agua hace danzar el pasto de mi jardín; me gusta mi vida aunque mi cuenta bancaria esté en números rojos; Renato tiene gripa y ayer se cayó a la alberca y me sacó un sustazo, pero hoy amaneció sonriente, feliz... ¡vivo! Mi Sabina es hermosa con su look desarrapado y su amorosísima manera de ser hermana de un escuincle encantador y "mulilla", como Su Majestad Renato; comí atún de lata aderezado con jugo de un limón de mi arbolito.... ¡wow!, ¿no?
lunes, 21 de septiembre de 2009
Un big bang en la mirada
Imagina dos mares que se juntan de pronto, en la más inesperada de las coordenadas de este mundo. El choque de mareas, de ritmos y vaivenes, de temperaturas, de densidades, faunas y floras debe ser confuso. Pero eventualmente lo logran: sincronizan su impredecibilidad y se vuelven un solo cuerpo de agua, se reconocen, resuenan como notas afinadas y esos dos universos comienzan a danzar un imposible tango al infinito.
viernes, 11 de septiembre de 2009
¿En cuántas cajas cabe tu vida?
(Calco del ingl. minimal art). 1. m. Corriente artística que utiliza elementos mínimos y básicos, como colores puros, formas geométricas simples, tejidos naturales, lenguaje sencillo, etc. (RAE)
En su ámbito más general, es referido a cualquier cosa que se haya desnudado a lo esencial, despojada de elementos sobrantes, o que proporciona solo un esbozo de su estructura, y minimalismo es la tendencia a reducir a lo esencial. Se aplica también a los grupos o individuos que practican el ascetismo y que reducen sus pertenencias físicas y necesidades al mínimo, es también el significado a simplificar todo a lo mínimo y generar un "corto circuito" en el receptor de la obra. (Wikipedia)
No quiero treguas
Apareces de nuevo
Después de tantos años
La leyenda viviente
Convertido en mortal
Que no envejece.
Es una tentación muy grande
Dejarme acompañar
Por tus palabras graves
Permitirle a tu voz
Acariciarme
Escapar con tus versos
De mi bosque.
Hoy te miro a los ojos
Tan serenos
Y conlcuyo que no.
No voy a establecer tormentas
Ni ventiscas que coarten el sosiego
Al tiempo que me impiden
Terminar con mi guerra que ya escampa.
No quiero treguas
Sino armisticios contundentes
Para mi corazón.